En 2014 compré una Harley Davidson Sportster 883 XLH de segunda mano. Nada más tenerla, ni siquiera di una vuelta con ella: directamente entró al taller. Se desmontó por completo, el subchasis fue recortado y saneado, y finalmente llevado a pintar al horno.

Vendí gran parte de las piezas originales, como manillar, horquilla, foco y guardabarros delantero y trasero. Después compré todo nuevo: luminarias, horquilla (springer), ruedas, depósito, multifunción, centralita… todo debidamente homologado. Algunas piezas se hicieron artesanalmente, como el soporte del guardabarros trasero, el manillar y los soportes del faro e intermitentes delanteros.

Finalmente, llevé a cabo el proyecto de homologación.

¡Ah! Los detalles del diseño de la pintura del depósito los creé yo, y mi amigo Javi Mon los plasmó. Aunque, como podéis ver en la segunda modificación, cambié color y diseño, obra de Jose Luís Barreda, un gran profesional del sector.

La primera modificación salió en la revista Biker Zone (nº 265, agosto 2015), donde publicaron un artículo sobre todo el proceso de transformación.